Con el fin de evitar accidentes ocupacionales por caídas o resbalamiento, los suelos de los locales de trabajo deberán ser fijos, estables y no resbaladizos, sin irregularidades ni pendientes peligrosas.Los equipos de trabajo que por su movilidad o por la de las cargas que desplacen puedan suponer un peligro, en las condiciones de uso previstas,